Conoce con Volvo qué son el sobreviraje y el subviraje

Durante el momento de la conducción existen una serie de circunstancias en las que podemos perder el control de nuestro vehículo. Dos de esos momentos son denominados sobreviraje y subviraje. Con el objetivo de garantizar tu seguridad, en día de hoy desde Volvo te contamos en qué consisten estos fenómenos y cómo podemos evitarlos.
-Sobreviraje
Efecto que se da normalmente cuando las ruedas motrices traseras del coche pierden adherencia y el tren trasero empieza a girar más de la cuenta, hasta el punto de llegar a hacer un trompo.
Para poder corregir esta situación hay que hacer un contravolante (girar el volante en el sentido contrario al que está desviándose el coche) y dirigir nuestra mirada hacia donde el coche tiene que ir (no hay que cometer el error de mirar hacia donde se está desviando el coche porque al final no conseguiremos cambiar la trayectoria).
-Subviraje
Término que se da cuando vamos a realizar un giro y la dirección no obedece porque las ruedas delanteras motrices han perdido el agarre con el suelo. Cuando ocurre un subviraje, conseguirás dominar el vehículo de nuevo al dejar de acelerar durante la curva. Habrá un instante en que las ruedas dejen de deslizarse de forma incontrolada para volver a tener adherencia. Es entonces cuando la dirección volverá a responder.
Una vez conocido su significado te mostramos una serie de consejos para intentar evitarlos:
1.Cambia los neumáticos cuando toque: con el paso del tiempo se suelen cristalizar y la goma ya no mantiene sus propiedades de resistencia y agarre, según lo que recomienda el fabricante.
2.No conduzcas de forma agresiva, a alta velocidad y con movimientos bruscos: son estos gestos los que pueden provocar que el neumático pierda la adherencia. Te damos algunos trucos para mejorar la conducción.
3.Mira hacia el frente y no unos metros por delante del capó cuando conduzcas: podrás saber el tipo de curva que tienes a continuación y así adaptar la velocidad del coche según las circunstancias de la vía.
4.No frenes en mitad de la curva: aunque estén las ayudas electrónicas que estabilizan el coche, evita forzar la inercia del coche y no acciones el pedal del freno durante la trazada de una curva.
5.Mira hacia el frente y no unos metros por delante del capó cuando conduzcas: podrás saber el tipo de curva que tienes a continuación y así adaptar la velocidad del coche según las circunstancias de la vía.
6.Observa que el dibujo de los neumáticos sea el correcto y tenga al menos 1,6 mm de profundidad. Si conduces con neumáticos lisos, éstos no tendrán tanto agarre cuando haya agua en el suelo, y perderán antes su adherencia.